
Si llega a suceder esta situación, ¿qué debes hacer? En primer lugar, tienes que llamar al teléfono de contacto para averías de tu región. Tras esta llamada comenzaremos el protocolo para solventar la avería lo antes posible a través de la Brigada de Mantenimiento más cercana, que es avisada por el Centro de Control.
Es este equipo el que soluciona la avería, garantizando ante estas circunstancias su propia seguridad frente a las posibles inclemencias. Además, si se trata de una avería grave, la prioridad será restablecer y asegurar el servicio a aquellos clientes que se consideran especialmente sensibles por su actividad. En este grupo se incluyen los hospitales, servicios de emergencia, policía, empresas suministradoras de agua, etc.
En ocasiones, una avería se puede producir únicamente en tu instalación y no tratarse de una interrupción del suministro eléctrico en la red. En esta situación lo primero que debes comprobar es que los interruptores del cuadro general de mando y protección de tu vivienda estén levantados, incluido el general y el diferencial.
Una vez hecho esto, el siguiente paso es bajar el interruptor central y dejar pasar tres segundos, para volver a subirlo nuevamente después. En caso de que no se restablezca el suministro, debes comprobar que la avería no se deba a que se ha sobrepasado la potencia contratada.
Para asegurarte de que este no es el problema, desconecta algún aparato eléctrico que tengas en marcha y repite la operación anterior. El problema debería haberse solucionado, pero en caso de que continúe la avería deberás avisar a un instalador para que se encargue de revisar la instalación de tu domicilio.
Como consejo para estos casos, asegúrate de tener varias linternas a mano con pilas para evitar el uso de velas y procura no abrir la nevera y el congelador para que no pierdan frío hasta que se restablezca el servicio. En cualquier caso, si necesitas más información o quieres avisar de una avería, puedes hacerlo a través del apartado de contacto de nuestra web.